Enrique VIII - Hans Holbein "El Joven" - (Museo Thyssen-Bornemisza)
Nacido en 1491 en Greenwich en el palacio de la Placentia, fue el tercer hijo de Enrique VII de Inglaterra y de Isabel de York.
Enrique recibió una buena educación, hablaba latín, francés y español y era gran amante de la música, de las artes y de la arquitectura. Era además un joven deportista que gustaba de participar en justas y en cacerías . Algunos de los cronistas de la época lo describen como un hombre guapo, de tez blanca, pelo castaño-rojizo y muy elegante. Con el tiempo, este atractivo joven que no había nacido para reinar, se convertiría en un rey absolutista y tiránico.
Enrique llego a ser Rey por una jugada del destino. Su hermano Arturo era el primogénito y por lo tanto fue jurado Príncipe de Gales como heredero al trono de Inglaterra. Arturo se había casado con la Infanta Catalina, hija de los Reyes Católicos, pero moría a las pocas semanas del matrimonio tras sufrir una infección. Quedó pues Catalina en la corte de su suegro a la espera de que éste y su padre decidieran su futuro.
Muere el Rey en 1509 y unas semanas antes de ser coronado, Enrique desposa a la Infanta Catalina, viuda de su hermano, para asegurarse la alianza con España, y ambos son coronados Reyes de Inglaterra en Junio.
Catalina de Aragón - Michel Sittow - Kunsthistorisches Museum
Aquel joven, elegante y atractivo que se había convertido en Rey de Inglaterra, va engordando conforme se acerca a la edad madura y además, ha sufrido distintos accidentes mientras participaba en las Justas uno de los cuales le deja una herida en el muslo que no consigue cicatrizar. Su carácter va cambiando, come y bebe en exceso y da muestras constantes de despotismo.
Enrique empieza a obsesionarse con la idea de conseguir un heredero varón que asegure el trono de Inglaterra a la dinastía Tudor pero, a pesar de que su esposa Catalina queda embarazada en al menos siete ocasiones, todos los hijos se malograrán y sólo llegará a la edad adulta María.
A los 24 años del matrimonio, Enrique consigue el divorcio de su esposa argumentando relación incestuosa por haber estado Catalina casada con su hermano. Lograr este divorcio le costó la ruptura con la Iglesia de Roma. Enrique se casó cinco veces más. Sobre sus esposas está casi todo escrito. Dos de ellas fueron decapitadas por orden del Rey tras los juicios pertinentes y con argumentos falsos. Tres de ellas le dieron hijos: Catalina de Aragón a María. Ana Bolena a Isabel y Jane Seymour al ansiado varón, Eduardo, que, no obstante, fue un niño débil y murió a los 15 años.
Mucho se ha dicho sobre las enfermedades de Enrique VIII; que padeció viruela, cosa muy probable dada la época histórica, que estuvo enfermo de paludismo, que sufría gota y diabetes, lo cual teniendo en cuenta su obesidad y su dieta es algo más que probable y que tenía úlceras en las piernas y enormes venas, lo que podría explicar que estas úlceras fueran de origen varicoso. Pero, también se ha llegado a decir que, con toda seguridad, Enrique VIII era sifilítico y esto habría ocasionado su dificultad para engendrar hijos sanos al trasmitirla a sus esposas pero, esta teoría, está cada vez más desacreditada ya que engendró hijos sanos y los síntomas que presentaba el monarca en lo que hubiera sido la fase tardía de la enfermedad podrían ser debidos a otras causas.
Enrique VIII - Hans Holbein "El Joven" (Galleria Nazionale d'Arte Antica)
La teoría más novedosa aparece en Mayo de 2011, cuando Catrina Banks y Kira Kramer publican en The Historial Journal un articulo titulado "Una nueva explicación para los males de la reproducción y el declive de Enrique VIII". Las autoras de éste artículo consideran que era más que probable que Enrique fuera antígeno Kell positivo, lo que, según ellas, explicaría sus dificultades para engendrar hijos sanos. Además, consideran que también es probable que sufriera un síndrome de McLeod, síndrome que esta ligado al antígeno Kell y que se manifiesta en la cuarta década de la vida con trastornos neurológicos y demencia.
El Dr Malcon Needs, director del Departamento de Sangre y Trasplantes del Tooting Medical Centre de Londres, publicó pocos meses después un artículo en The Biomedical Scientist rebatiendo estas teorías y demostrando que tanto Banks como Kramer muestran una escasa comprensión de las leyes Mendelianas. Si un hombre Kell positivo engendra un hijo en una mujer Kell negativo, este primer hijo podría nacer pero no los siguientes, ya que, los anticuerpos creados en la madre destruirían al siguiente feto. Hay que recordar que la princesa María nace en la cuarta gestación de Catalina de Aragón. Por otra parte - añade el Dr Needs - los enfermos del Síndrome de McLeods sufren infecciones de repetición debido a que los glóbulos blancos no son capaces de destruir las bacterias y teniendo en cuenta que no era la época de los antibióticos el monarca habría muerto a temprana edad, cosa que no sucedió. Concluye además diciendo que, una gran cantidad de enfermedades neurodegenerativas podrían haber dado estos síntomas y que no existe ninguna evidencia que permita decir que Enrique fuera Kell positivo.
Enrique VIII falleció el 28 de Enero de 1547 en el palacio de Withehall. Fue sepultado en la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor
Castillo de Windsor
Menuda pieza era este Rey. No me extraña que después de tanto divorcio y falso testimonio le costara la ruptura con la Iglesia. Muy buena reseña Ámbar.
ResponderEliminarBss
No cabe duda, Enrique VIII era una buena pieza, sin escrúpulos y sin capacidad para el arrepentimiento.
EliminarGracias por tu comentario
Besos
Todo un dechado de virtudes y físicamente una ruina.
ResponderEliminarLo del alcoholismo del monarca era un secreto a voces. Parece ser que en todas la estancias siempre había preparada una jarra con vino.
Un saludo.
Sí, era un gran comedor y un gran bebedor.Vamos que estaba conservado en alcohol como suele decirse.
EliminarUn saludo
Muy interesante.Todas estas deficiencias y afecciones no cabe duda que alteraban el carácter de su majestad. En estos tiempos hubieran sido tratados, aunque algunos tal vez jamás debieron reinar.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Saludos.
Es muy probable que sus enfermedades, muchas de las cuales ignoramos, influyeran o más bien fueran la causa de los cambios en su carácter.
EliminarGracias por tu comentario.
Un saludo
Joven deportivo pero con el tiempo se convirtió en un comilón y bebedor como todos de aquellos tiempos. Sus enfermedades algo debieron de influenciar en la salud de sus hijos. Con respecto al matrimonio no era un problema para él, ya que tenía facilidad en hacer y deshacer.
ResponderEliminarUn abrazo
Los reyes de aquella época veían poco a sus hijos, aunque es casi seguro que el ambiente que estos reyes creaban a su alrededor debían influirlos notablemente.
ResponderEliminarUn beso
Buenas tardes:
ResponderEliminarHabía leído sobre esto del Kell + de Enrique VIII.De hecho, asití a una conferencia sobre esto el año pasado en Madrid. El conferencista, indicó qe posiblemente no era kell+ completo sino quizás una variedad.
Esta por verse esto.
Saludos
Indudablemente el sistema Kell es mucho más complejo de lo que yo apunto en la entrada sobre Enrique VIII.He considerado que nadie que no pertenezca a la profesión médica podría estar interesado en el tema.
ResponderEliminarMe habría gustado asistir a esa conferencia.
Saludos
Buenos días, Ambar:
ResponderEliminarNos ha interesado mucho tu entrada. No nos imaginábamos que se hablara tanto de las afecciones de Enrique VIII, aunque era de suponer que tuviera interés por lo compleja que fue su descendencia y su política matrimonial.
Nos interesan mucho estas figuras como Enrique VIII o Carlos V en España, donde personas que no habían nacido para reinar se encontraron por los avatares de la vida con mucho poder que gestionar.
Gracias de nuevo. Saludos.
Enrique VIII fue un rey tan complejo y con tanta trascendencia histórica que ha sido estudiado desde todas las perspectivas y sin duda lo seguirá siendo.
EliminarGracias por vuestro comentario
Me ha encantado esta entrada sobre la figura de Enrique VIII, que tuvo una relativamente larga vida para lo que se llevaba entonces y sus muchas enfermedades. Sus hijos tampoco gozaron de buena salud. María, como dices, la única que alcanzo edad adulta tampoco fue una mujer sana.
ResponderEliminarEstupenda entrada y magníficos retratos. El de Enrique lo he visto en el Thyssen, pero el que realmente más me gusta es el de Catalina de Sittow.
Un abrazo.
Coincido contigo el retrato de Catalina es también mi preferido. Me alegra que te haya gustado la entrada.
ResponderEliminarUn abrazo
Con estas aportaciones se vislumbra la Historia de otra manera. Respecto al retrato de Doña Catalina, admira la impresión de inteligencia y de fuerza interior que expresa.
ResponderEliminarSaludos.
No sé si he aportado algo que ayude a entender mejor la figura de Enrique VIII.
ResponderEliminarTiénes razón el rostro de Catalina expresa inteligencia y decisión a pesar de que la actitud corporal indique sumisión y respeto
Saludos
De el retrato que figura en el Tyssen, el hitoriador británico John Wyndham Pope-Hennessy dijo que: "la cabeza, cuyos ojos no nos miran, está dotada de una solidez y fortaleza casi arquitectónica". Realmente, forma un bloque compacto con el tórax. Hans Holbein siempre le retrata también con los puños cerrados, como si quisiera reflejar la crispación que este hombre debía llevar en su interior.
ResponderEliminarMagnífico tu blog que nos permite descubrir aspectos curiosos de los seres que tuvieron un papel importante en la Historia. Un saludo
Desconocía la la cita de Pope-Hennessy, así que te agradezco la aportación.La verdad es que siempre aprendo de ti.
ResponderEliminarTu si que tienes un blog estupendo.
Un saludo
Genial el retrato de Hans Holbein: representa toda la personalidad del monarca y todo el concepto de la monarquía autoritaria. Estupendo post. Abrazos.
ResponderEliminarSi, Holbein era muy grande y supo hacer no sólo un retrato sino todo un estudio de la personalidad de este monarca absolutista y tiránico.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
Saludos
Tenía que ser complicado estar bajo el mando del iracundo Enrique.
ResponderEliminarCurioso que los hijos del actual príncipe Carlos de Inglaterra llevan unas gotas de sangre española procedente de aquellos tiempos. Lady Di descendía de María de Salinas, dama que acompañó a Catalina de Aragón en su periplo por Inglaterra y que casó con un noble inglés.
Un abrazo.
Buenos Días,
ResponderEliminarMe llamo Maria Rosa y soy una estudiante de idiomas, italiana. Formo parte del proyecto “Auramala”, una larga búsqueda sobre el misterioso fallecimiento del rey Eduardo II de Inglaterra, llevado a cabo por la asociación cultural “Il mondo di Tels” e Ivan Fowler, escritor. ¡Quizás encuentren este misterio bastante cautivador!
Aquí tienen los enlaces en italiano e inglés:
http://www.youtube.com/watch?v=6KS3IRciYMs
http://www.youtube.com/watch?v=QUfoCcNu6GA&feature=share
Buena Visión,
Maria Rosa e IlMondoDiTels